Leonel merece ser comprendido

Mi voz escrita //

Jorge Herrera

En mi colaboración del viernes, manifesté que al presidente Leonel Fernández no le han permitido ser consecuente y solidario con sus amigos como él quisiera. El comentario fue a propósito del bombardeo de “voceros” de la oposición, en ocasión de alguna selección estratégica del mandatario. El ataque se recrudeció en el pasado proceso electoral, y, no obstante, los resultados hoy son irrebatibles.

Apunté en el escrito de marras que el término nepotismo, aunque no escapa a la consideración de mala práctica, la condiciona. Como si se tratara de confirmar la teoría de Albert Einstein, la definición del vocablo en sí misma es terminante: Nepotismo es la preferencia desmedida con amigos y familiares a la hora de hacer concesiones o asignar empleos estatales.

Sin embargo, no se limita al enunciado; sino que hasta alerta sobre la posibilidad de un desliz conceptual, con o sin mala fe, y lo califica. En este sentido agrega que: “Si la persona elegida acredita méritos suficientes para el cargo”; es decir, capacidad, experiencia, honestidad y cualquiera otra condición conveniente en el orden institucional, agrego yo, lo que se tilde de nepotismo es sólo suspicacia. Un caso muy diferente sería si se tratara de un advenedizo; un “ven tú”, sabrá Dios con cuáles aviesas intenciones.

No obstante, confieso que lo preocupante es que, en nombre de la alegada mala práctica, prominentes miembros del Comité Político del PLD estén empeñados en que el manto de la soledad arrope a destiempo a un Leonel Fernández que ni en sueño se ha planteado “correr más que la bola”.

Nadie más que él, ha entendido las nefandas consecuencias de los extremos. El Poder desgasta, no importa cuánto se sobreestime el ejercicio, y él lo sabe. En política la amistad como la conmilitancia, por más que se perjure, jamás deja de ser ficción, y él lo sabe. La gloria siempre será de los que no duermen mientras los demás madrugan, y él también lo sabe. Entonces, ¿Quién más que él sabría, qué es lo que más conviene al destino que se ha propuesto?

Santo Domingo, R.D., viernes, 13 de agosto de 2010

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