José Antonio Torres
Cada día los dominicanos recibimos desengaños, y esta realidad abarca desde el ámbito familiar hasta el gubernamental. Es como si la sociedad se derrumbara poco a poco. La inversión de valores mantiene a la población como narcotizada. A la gente nada le importa: “le da lo mismo “Juan que Juana”.
Sin embargo, hay un segmento de la población que tiene la responsabilidad de expresar lo que siente, de advertir que una parte de los problemas que padece el país resultan de la improvisación, la debilidad institucional y la politización de la función pública.
Antes del 16 de octubre, los senadores deben escoger a los nuevos magistrados de la Junta Central Electoral, encargados de organizar y administrar las elecciones presidenciales del 2012. El Senado debe también reducir de nueve a cinco los miembros de la JCE. Y aquí comienza el problema, dado que no se puede pensar en la sustitución completa de jueces que han demostrado probidad.
Lo mismo puede decirse de una parte del personal técnico, gente en cuya formación profesional el Estado ha invertido millones de pesos, pues ha pagado los servicios de instituciones extranjeras especializadas en la administración de procesos electorales.
Aura Celeste Fernandez.
A pesar de algunos problemas aislados, los últimos dos procesos electorales han sido un ejemplo de organización, y ese elemento deben tomarlo en cuenta los legisladores.
Cuando se escoja a los nuevos jueces, quedarán sólo 18 meses para las elecciones presidenciales, tiempo que sería poco para magistrados novicios. De modo que coincido con un importante segmento de la sociedad que piensa que hay que aprovechar la experiencia y honestidad de algunos de los actuales, a fin de que la nueva JCE comience con pies firmes.
Si fuera senador no aceptaría el “barrilito” y votaría a favor de una terna que integren los magistrados Roberto Rosario, Aura Celeste Fernández y Eddy Olivares. Sería una propuesta de equilibrio que llevaría confianza a los partidos políticos y a los electores.
Santo Domingo, R.D., martes, 31 de agosto de 2010
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