Los efectos positivos
de su política se verán
más claros en par de años
Tirso Mejía-Ricart
Soy un admirador del presidente de los Estados Unidos, Barack Obama. Su elección, la primera de un no blanco en una nación con una larga tradición de esclavitud y discriminación racial, habla bien del progreso en la integración social que se ha ido produciendo en ese país.
Obama hizo su campaña denunciando la guerra contra Irak por supuestamente poseer armas de destrucción masiva, las ganancias excesivas de las grandes empresarios y los fraudes bancarios, así como en favor de la reactivación económica, la universalización de los seguros de salud y una reforma migratoria humanitaria. Ofreció, además, eliminar el campo de concentración de supuestos terroristas de Al Qaida en Guantánamo, y un diálogo constructivo con los gobiernos de Cuba y Venezuela.
Tras dos años de Presidencia de Obama y de control demócrata en el Congreso norteamericano, podemos hacer un balance de su gobierno:
1- Logró retirar gran parte de las fuerzas norteamericana de Irak, aunque no se mantendrá sin retrocesos.
2- Redujo las ganancias de los grandes empresarios y su discrecionalidad en los manejos del sector financiero.
3- Se persiguieron algunos fraudes bancarios
4- Se aprobó una ley que universalizó el seguro de salud para norteamericanos y residentes documentados.
5- Se revertió la caída de las bolsas de valores, salvó de la quiebra de gran parte de la industria y estabilizó el desempleo, aunque sin reducirse.
6- No pudo iniciar la reforma migratoria.
7- Redujo, pero no eliminó el campo de concentración de Guantánamo.
8- Las iniciativas para regularizar las relaciones con los gobiernos de Cuba y Venezuela fueron tímidas y condicionadas.
9- En Cuba, un anacrónico bloqueo comercial que solo afecta al pueblo; y la prisión de 5 cubanos por “espionaje”, mientras terroristas como Posada Capriles disfrutan asilo, nada ayudan a la convivencia continental.
Los logros indiscutibles de Obama no han sido bien destacados, y los sectores más recalcitrantes de la derecha republicana han mantenido una campaña de feroz oposición con el apoyo de gran parte de los medios de comunicación social en poder de los petroleros texanos, los hacendados del Medio Oeste que disfrutan de subsidios, los banqueros y el movimiento radical “Tea Party”, con delirantes acusaciones de ser comunistas y ultraliberales. El resultado inicial de ese proceso fue la derrota electoral de los demócratas en las recientes elecciones de medio término, que les hizo perder el control de la Cámara de Representantes: pero lo probable es que se produzca una reversión de este proceso y Obama pueda ser reelegido el próximo año 2012, porque los efectos positivos de su política se verán más claros en un par de años. En Estados Unidos se están dando cambios demográficos que permiten una creciente participación de los negros y los latinos en la vida pública, y la aparición de una categoría racial hasta ahora ignorada: la de los mulatos, como el propio Obama, así como de otros mestizajes con sangre asiática, indígena y de otras razas; en esa sociedad multicultural construida por inmigrantes de todas partes.
Santo Domingo, R.D., domingo, 05 de diciembre de 2010
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