lunes, 14 de marzo de 2011

No vi ni a un solo político



Olga Capellán

En mi estancia  de casi un mes en Santo Domingo y por mi carácter  revolucionario que llevo en la sangre desde que nací, el 16 de Febrero decidí ir a la misa que ofrecieron los familiares a los mártires de Playa Caracoles en la iglesia de Nuestra Señora de las Mercedes y además porque sentía como un deber con la patria y sobre todo quería honrar la memoria de nuestro Francisco Alberto Caamaño Denó.

Cuando me encontraba allí y aprovechando mí temprana comparición con mi mirada rebusqué todos los rincones de la iglesia, además porque quería ver cuales de las personalidades del diverso quehacer nacional irían por la honra de nuestro Caamaño y demás héroes nacionales, digo héroes  si así les podemos llamar y que alguien me corrija  si estoy en el equívoco.

Francis, un coronel que decidió casarse con la Gloria.

Para nuestra sorpresa  aparte de los familiares, amigos y de un grupo de viejitos de los llamados constitucionalistas de la revolución de Abril de 1965 no se encontraban personalidades del mundo político nacional, fue cuando entonces entendí el porqué las cosas en la República Dominicana andan como están, ya que los hombres valientes del país están muertos o muy viejos, es decir ya no tienen fuerzas para luchar por el bienestar de la nación.

Pero los políticos no podían estar porque allí no había plazas para ninguno de ellos, ya que todos aquellos los que en algún momento se llamaron revolucionarios o de la izquierda forman parte del gobierno del PLD como aliados, justamente aliados a un Leonel Fernández, quien subió al poder gracias a la ayuda del Dr. Joaquín  Amparo Balaguer, siendo precisamente aquel caudillo quien ordenó el fusilamiento de los héroes de Playa Caracoles y de tantos otros más, entonces estos políticos no podían esta ahí y quizás fue hasta mejor para que con sus presencias no entorpecieran el desarrollo de la  homilía hecha por el padre Miguel.

A pesar de lo triste del acontecimiento, sentí mucha alegría; pues allí pude ver algunas personalidades que hacía anos que no veía como el caso de Dona Fellita Caamaño, Don Fernando Casado y como era lo más natural a  ese gran valuarte Claudio Caamaño y como dije ya no faltaron los veteranos constitucionalistas entre ellos Pujols, Dolores Capellán, Gerardo.

Sorpresa para mi fue no ver  a la figura de el gran MEMO, que aunque fuera probable que estuvieses allí, pero dado el caso del fallo de la energía eléctrica quizás lo pasé por alto, pero eso si, allí también conocí a un valioso joven llamado Tony, quien además de su padre Claudio hizo una especie de panegírico a nombre de la familia Caamaño.

El coronel glorioso en abril de 1965.

Tony Caamaño, por la forma de expresarse me hizo recordar la figura de nuestro inolvidable Francisco Alberto Caamaño de Denó, quien después de Juan Pablo Duarte a nuestro entender ha  sido la figura de mayor significado en toda República Dominicana, este valioso joven  hizo un llamado a la juventud dominicana a no olvidarse de luchar por la reivindicaciones del pueblo, a ser honesta  y recordó el deber de cada ciudadano el compromiso que tenemos para rescatar al país y a seguir  los ideales caamanista, estas palabras hicieron vibrar a cada uno de los presentes allí.

Finalmente, el conversa torio se extendió debido a un fuerte aguacero que nos hizo permanecer dentro de la iglesia por varias horas, luego de tanta dificultades pude regresar a casa gracias a las manos bondadosas del magistrado Don Fernando Casado; hay muchas cosas para recordar y en fin nos las pasamos muy a menas, pero eso sí ninguno de los políticos estuvieron allí, ya que no les importaron  ni Caamaño ni ninguno de los mártires de Playas Caracoles porque  a ellos les van muy bien ya que están todos en el gobierno de Leonel Fernández y el PLD, herederos de Joaquín Balaguer.

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