¿Qué tan incómoda es nuestra verdad?
Virgilio
Miniño, Ph. D.
Es muy común ver como se entrelazan los
términos calentamiento global y cambio climático. El calentamiento global se refiere al
aumento de la temperatura media del
planeta. En tanto que el cambio climático se refiere a la
modificación del clima, ya sea regional
o global.
Hay un consenso generalizado entre los
científicos de que el paneta se esta calentando. Aunque hay quienes no terminan
de admitir que el hombre es el primer causante de tal efecto. La gran mayoría
de los científicos aseguran de que sí somos los responsables.
El organismo de
las Naciones Unidas encargado del análisis de los datos científicos referentes
al cambio climático es el Panel Intergubernamental del Cambio Climático (Inter-Governmental Panel on Climate Change), el cual se le conoce como
IPCC por sus siglas en inglés. Este organismo ha publicado innumerables
artículos referentes al proceso del calentamiento global y el cambio climático
y ha servido para ser un centro de referencias. El IPCC ha dado suficientes
pruebas de que el calentamiento global es una realidad. Pero no solo eso. Los
científicos también aseguran que el calentamiento global es un proceso
irreversible, y que aun si el hombre cesara de contaminar el planeta el proceso
no se detendría en más de mil años.
En el país hay un grupo reducido de
personas que dominan el tema, y otro grupo aun más reducido que tiene acceso a
las más recientes informaciones del fenómeno, ¿cómo podemos combatir los daños
por venir del cambio climático si la población en general no está debidamente
educada? Y más aún, ¿qué están haciendo las autoridades competentes para
enfrentar los daños inminentes a causa del cambio climático? ¿Qué evaluación ha
hecho el gobierno para mitigar en nuestro país los efectos de un eventual
cambio climático?
Somos una isla y dependemos grandemente
del turismo. En los últimos 100 años el nivel del mar ha subido alrededor de 18
cm, aunque en las últimas décadas el aumento ha sido más del doble. Los modelos de computadora predicen una
subida del nivel del mar entre 0.18 y 7 metros antes del fin del presente
siglo. Obviamente que estas cifras dependen de muchos factores, incluyendo el
derretimiento de los mantos de hielo que cubren Groenlandia o la Antártida
occidental. Los científicos también están de acuerdo en que nadie tiene idea de
un punto crítico, el cual desataría un derretimiento de dichos mantos de una
manera acelerada y no prevista. Aun no se puede predecir con exactitud lo que
sucederá en los próximos 10 o 20 años, pero podría ser desastroso. Una subida
del nivel del mar sin dudas que afectará nuestras playas al igual que nuestros
puertos. Pero no solo eso, sino que la
agricultura, la ganadería, la industria, entre otros aspectos, sufrirán sus
efectos. Por ejemplo, un incremento de las precipitaciones tendrá efectos negativos en la producción agrícola, y
la erosión se agravaría.
No es fácil convencer a la población
sobre los efectos del cambio climático. Este es un proceso lento y, como tal,
es más difícil de comprender e interiorizar.
Y muchas publicaciones y películas al respecto lo que hacen es confundir,
como “El día después de mañana”, entre otras, pues la gente espera un evento
repentino.
Como parte del calentamiento
global/cambio climático se prevé que las temperaturas de los océanos van a subir.
Para la República Dominicana esto significará más huracanes y de más
intensidad, al igual que más tormentas tropicales.
La población reacciona fácilmente (por
lo menos relativamente) a las amenazas de huracanes, sabe que tenemos una temporada ciclónica, y sabe del
peligro de las tormentas tropicales. De igual manera ve y lee las noticias de
huracanes en otras geografías. Pero,
¿cómo asegurarnos de que la población le preste la necesaria atención al tema
del cambio climático? Solo a través de la educación se podrá ir
generando una actitud consciente hacia el problema y un mayor involucramiento de las personas.
Por otra parte, estamos acostumbrados a
depender de ayuda internacional para hacer frente a muchos de nuestros
problemas, especialmente los referentes a los ambientales. Aunque las naciones
desarrolladas tienen una responsabilidad, y una obligación innegable a
brindarnos ayuda (la cual considero que la que recibimos aun no es lo
suficiente) nosotros también deberíamos ser un poco más creativos e involucrar,
no solo el sector empresarial en nuestros esfuerzos para combatir el cambio
climático, sino también a todos los sectores de la sociedad, pues eventualmente
todos vamos a ser afectados.
Santo Domingo, R.D., lunes, 27 de febrero de 2012.
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