Prof. FÉLIX SANTANA GARCÍA
El
gobierno y su candidato a través de sus últimas actuaciones dejan ver
desesperación al comprobar que no alcanzan la proporción que para esta
etapa de campaña deberían haber alcanzado
A menos de sesenta días de las próximas
elecciones nacionales del 20 de mayo de 2012, el partido de gobierno
de República Dominicana (PLD) bajo la acusación de pretender instaurar
una neo-dictadura, está haciendo lo indecible para mantenerse en el
poder más allá del 16 de agosto del presente año, no obstante augurar el
declive de sus posibilidades para alcanzar sus propósitos en ese
sentido.
Esto así, ya que el gobierno y su candidato a través de sus últimas actuaciones dejan ver desesperación al comprobar que no alcanzan la proporción que para esta etapa de campaña deberían haber alcanzado, no obstante el candidato oficial contar con todas las facilidades mediáticas y recursos financieros para estar en la cima de la popularidad y aceptación de la mayor parte del electorado.
Muestra de tal desesperación es el hecho
de que el equipo de campaña del candidato oficialista está pendiente
del más insulso pronunciamiento que el candidato opositor Ing. Rafael
Hipólito Mejía Domínguez exterioriza, al extremo de que hasta la
respiración le controlan.
Se diría que esa debe ser la estrategia
para acortar la ventaja que el señor Mejía Domínguez le lleva en la
preferencia del electorado, pero en este caso es todo lo contrario, ya
que la población lo que percibe es que al candidato oficialista se le
agotaron los temas de campaña, que quien le pauta la agenda es el
Ingeniero Mejía.
Otra muestra de la ineludible derrota
que lo propinará el candidato del Partido Revolucionario Dominicano
(PRD) el 20 de mayo venidero, es el hecho de que todo lo que expresa el
Ing. Mejía en los diferentes foros donde este se presenta le dan el
carácter y peso de un candidato ya en el poder.
Un indicio elocuente de la derrota del
candidato oficialista es que muchos de los connotados dirigentes del
Partido de la Liberación Dominicano (PLD) no muestran su acostumbrado
entusiasmo, ni participan de las actividades de su candidato.
Ante tan cruda realidad el actual equipo
que gobierna los destinos del país se concentra ahora, específicamente a
preparar su retiro, muchos de ellos se aprestan a gestionar de forma
rauda y veloz el cobro de cubicaciones de obras que les han sido
asignadas como ayuda para el incremento de sus muy abultados ingresos.
Agilización del cobro de comisiones,
ordenar documentos de viajes y nombramientos de hijos, amigos y
familiares en los diferentes departamentos de la administración pública.
Pero como si esto no fuera poco, muchos
de los funcionarios y empleados del partido que gobierna aceleran el
proceso de adquisición bienes raíces e inauguraciones de nuevos negocios
de comidas y bebidas en sectores de clase media que les permitirá vivir
en la oposición disfrutando de los pingues beneficios obtenidos durante
más de 7 años ininterrumpidos en la administración del aparato estatal.
También se reporta desde los distintos
estamentos de la administración pública el aumento de solicitudes de
pensiones y jubilaciones para evitar que por no reunir los requisitos
para su retiro puedan perder los atractivos emolumentos que actualmente
perciben.
Asimismo y tal como denunciara el
candidato del PRD Ing. Rafael Hipólito Mejía Domínguez se celebran
contratos de deudas dolosas, debajo de las mesas y aumento de nóminas de
empleados con el propósito de perjudicar su próxima gestión de gobierno
que desde sus inicios estará comprometida a pagar los altos compromisos
de deudas externa e interna y mitigar los efectos de los déficits
fiscal y de balanza de pagos que han caracterizado su mala gestión
administrativa.
Ante tales acciones y desmanes las
autoridades de turno deben, aunque sea en este último tramo de su
gobierno, cumplir las leyes y la constitución de la República e invocar a
la Cámara de Cuentas y la Contraloría General de la República, para que
de forma responsable tomen las medidas correspondientes a los fines de
custodiar y preservar los bienes del Estado, los cuales forman parte del
patrimonio nacional.
(El autor es administrador financiero. profesor universitario y dirigente del PRD)
Santo Domingo, martes, 27 de marzo de 2012.
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