El Casandra

Chiqui Vicioso 

luisavicioso21@gmail.com

(I-III)

Llegué a un medio matutino, con el director de ediciones de Casa de las Américas, doctor Roberto Zurbano Torres.  Y llegué como quien llega a su vieja casa, por dos razones:  mi abuelo, Diodoro Danilo Vicioso,  laboró en ese medio durante tres décadas, y yo fui columnista durante doce años, en los legendarios y cálidos tiempos de don Rafael Herrera.

Un aspecto de la presentación, en Casa de Teatro, de "Cantares de la Pasión Lícita". 

Al frente del área cultural, un jovenzuelo dijo “ignorar “quiénes  éramos, y al frente de VIVIR, otra malhumorada muchacha, dijo que si el director del periódico quería que se publicara la reseña de la puesta en circulación de Cantares de la Pasión Lícita, antología de toda mi poesía publicada, editada por Casa de las Américas, la pusiera en “su“ sección, La República.  Primera vez que descubro que a un director se le reduce a una sección, reafirmando el dicho de que “de fuera llegarán que de casa nos echarán”.

Lograr la reseña fue un ejercicio de tenaz paciencia y educación del redactor.  “M’ hijo, para enterarte de quiénes son tus entrevistados, ahora solo tienes que buscar en Google”…, proceso con resultados a medias ya que la reseña solo salió publicada en el Listín Digital, donde solo una minoría tiene acceso. En ese sentido, me permito recomendar las reseñas del Caribe, El Nacional y el periódico digital 7 Días, modelos de periodismo cultural.

Otro angulo de la asistencia a la puesta en circulación de "Cantares de la Poesía Lírica", de Chiqui Vicioso.

Vivimos, en la época de la compraventa de opiniones; del periodismo como escalera social, y quien no se adapte a esta práctica se convierte en persona non grata para las redacciones, o programas de algunos medios, donde solo la vieja estima de sus directores (caballeros de antaño que desgraciadamente ya no abundan) se impone a un periodismo que ha convertido las redacciones  y programas de algunos medios en refugios de “nuevos arribistas”, o viejas disidencias que han encontrado en nuestro país una ventana para sus resentimientos, o aspiraciones de significación social.

Resumo, en este artículo, la conversación que sostuve con el presidente de Acroarte, cuando comentábamos la decisión de la familia Damirón de retirar el nombre de su madre de los premios, dialogo  sobre la responsabilidad social de los y las cronistas sociales frente a un país que se está desintegrando culturalmente.  De ello trataremos en la próxima entrega.(Ilustración de Presenciadigitalrd con fotos de fuente externa).

Santo Domingo, R.D., viernes, 31 de agosto de 2012.

http://presenciadigitalrd.blogspot.com/2012/08/el-casandra.html