Venecia Joaquín
El Congreso Nacional es un cuerpo legislativo formado por la Cámara de Diputados y la de Senadores. Su misión es importante y delicada: trabajar en el alma, en la esencia de la nación para que la sociedad se desarrolle de manera ordenada, justa, equilibrada, repercutiendo en el bienestar de la población.
Eso significa que el Congreso tiene responsabilidades tremendas en la dinámica de la nación. Efectivamente, dentro de sus deberes están: someter proyectos de leyes, resoluciones, fijar normas y principios, denunciar y corregir asuntos que afecten negativamente el comportamiento del individuo y las instituciones. Su deber es trazar directrices, principios, que contribuyan al desarrollo integral. Deben viabilizar el camino, quitar los obstáculos que impidan llegar a la meta, establecer normas que garanticen la educación, salud, empleo, desarrollo general. Contribuir a que la población este al alcance de los bienes del Estado para que salga de la pobreza y no tenga que recibir limosnas.
Estas son en síntesis, tareas de los hombres y mujeres que llevamos al Congreso. De su labor depende el futuro de nuestros hijos. Que no tengan que ser mendigos sino seres humanos productivos y dignos.
Yo estoy concentrando mi atención en la personalidad de los candidatos para las próximas elecciones. No permitiré que me confunda la tanta publicidad, belleza física, regalitos pasajeros, el poder que ostentan, ni las obras materiales que exhiben u ofrecen. Buscare su verdadero sentir. Su YO interior, la sinceridad. Como diría mi padre, le leeré la mirada.
Muchos están prometiendo y exhibiendo obras materiales. ¿Quién le ha dicho que su misión es hacer obras materiales?. Eso le corresponde al Poder Ejecutivo, al gobierno, a las sindicaturas. Los congresistas deben atender el alma, no al cuerpo. Si el alma esta en orden, el cuerpo tiene que obedecerle. Deben obligar a trabajar en beneficio de todos, no de un grupo. Me “quilla” ver como anestesian al pueblo con tanta publicidad.
Le bloquean la mente para que solo vea las obras materiales, dadivas, promesas, impidiéndole pensar en su realidad y futuro. Quizás por eso le mantienen en el analfabetismo, hambre, en la pobreza. La idea es que dependan de ayuda, de limosnas. ¡Ay, que pique!!.. Da asco esta forma de llegar y mantenerse en el poder.
Sueño con congresistas que ayuden a la población a ser independiente, en todos los sentidos. Ojala que las míseras dadivas recibida, no le impidan ver las intensiones del candidato. Que cual indios, no sean engañados con los espejitos. Por Dios, votemos por los que creemos se fajaran a hacer leyes y hacerlas respetar, para que nuestros hijos vivan en un clima de seguridad y respeto. Es nuestra gran oportunidad, ahora por seis años.
Santo Domingo, R.D., domingo, 18 de abril de 2010
veneciajoaquin@hotmail.com
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