domingo, 28 de noviembre de 2010

Haití: la tragedia de un país desolado en un mundo globalizado


Williams De Jesús Salvador

(l de V)

Los diplomáticos son poco dado a tratar temas controversiales, cuya interpretación depende de los intereses personales o gregarios de cada quien o en forma colectiva. 

El comunicador, Secundino Rojas, me solicitó que le analizara las perspectivas de la República de Haití, en el marco de la impronta y tétrica realidad haitiana, que tiene ribetes de tragedia nacional. 

Para comprender los problemas actuales de Haití, es necesario conocer los aspectos históricos más relevantes desde su nacimiento como República libre e independiente hasta la fecha. 

Haití, ocupa la parte occidental de la Isla de Santo Domingo, La superficie total de Haití se extiende en 27.750 km², albergando una población de 10.033.000 habitantes (2009)[4]Su capital y ciudad principal es Puerto Príncipe, destruida por un terremoto el 12 de enero de 2010. 

Su territorio comprende igualmente la isla de la Gonâve, la isla de la Tortuga, el archipiélago de las islas Cayemites y la isla de Vaches así como otros diversos islotes de sus aguas territoriales. La inhabitada isla de La Navasse (en español isla Navaza es reclamada por Haití ante la administración de los Estados Unidos. 

Haití, fue el segundo país del continente americano que proclamo su independencia después de Estados Unidos de Norteamérica y el primero de América Latina, en el año 1801, que aunque se liberó de Francia, pero su guerra de independencia enfrento no solo a Francia, sino a Inglaterra y España. 

Obviamente, que influyó de manera fundamental para que la Revolución Haitiana triunfara fue la Revolución Francesa del 11 de septiembre de 1789\ tuvo un fuerte impacto sobre la sociedad racista y esclavista de la colonia. Inicialmente la igualdad entre los hombres proclamada por la revolución no se aplicaba a los esclavos, pero tampoco a los mulatos ni a los negros libres. Esto fue un simple enunciado, la más universal de las revoluciones crea un nuevo código universal de libertad para la humanidad, que ni Francia y su emperador podían contener. 

El cólera, es una tragedia nacional para la hermana República de Haití, que ya fue estremecida por un catastrófico terremoto de 7.3 en la escala de Richter, el 12 de enero de este año, destruyendo la mayor parte de la ciudad e importantes monumentos nacionales. Posteriormente sobre su suelo agrietado y muros caídos, pasa el 5 de este mes de noviembre, el huracán Thomas. La solidaridad internacional ha sido más retorica que realidad. 

Historia del cólera, es una enfermedad diarreica aguda, provocada por la bacteria el vibrio cholerae, descubierta por Robert Koch en el 1884, cuando trabajaba con enfermos en Egipto y la India, el descubrió que la enfermedad era producida por un microorganismo en forma de coma, según investigaciones de Kumate et el, 1993. 

El cólera apareció por vez primera en 1887, cuando se produjo una pandemia que azoto inmisericordemente a la humanidad, causo una mortalidad importante principalmente en la India. Europa fue azotada en el 1826, impactando a Moscú, Berlín y Londres, traspasando el océano atlántico para llegar al hemisferio americano en el año 1832 hasta el 1839. 

Esta enfermedad infectocontagiosa de fácil propagación, golpeo brutalmente a los tres continentes: Asia, África y América, en el año 1826. El siglo XX nuestros países del Área del Caribe y América Latina, estuvieron libre de esta peste, hasta el 27 de enero del 1991 en que apareció al norte de Perú, específicamente en el Puerto de Chancay, propagándose a 16 países y afectando a 650,000 personas en un lustro. 

Las condiciones sanitarias de pueblo haitiano, ha sido propicia para que esta enfermedad se propague con rapidez en todo el territorios nacional, que según las “últimas estadísticas”, el número de muertos por la epidemia de Cólera en Haití supera ya los 1,300, según las últimas cifras del Ministerio de Salud, mientras las morgues del país empiezan a rechazar las víctimas de esta enfermedad, que son enterradas en su mayorías en fosas comunes. Los casos registrados superan los 56, 900, mientras que los hospitalizados llegan a 23, 377. 

La próxima entrega, hablaremos de las epidemias y catástrofes que han afectados a la isla de Santo Domingo y sus repercusiones económicas y políticas. (El autor es Médico y Diplomático.)

Santo Domingo, R.D., domingo, 28 de noviembre de 2010

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