PANCARTA
Raúl Pérez Peña (Bacho)
“Empezados los primeros años de los ‘40, la dictadura había sometido virtualmente al país a su omnímoda voluntad después de minar la oposición mediante el exterminio, el destierro y el chantaje.
El crimen se enseñoreó sobre las familias más firmes en sus convicciones, y las últimas testas del intelecto y la dignidad habían sucumbido al halago, al soborno, al engaño de la colaboración constructiva, o se había sumido en una especie de reclusión permanente para sobrevivir a la amenaza de la compulsión personal o familiar que les abocaría a una humillación inminente”. Juan José Cruz Segura, Bajo la Barbarie.
El extracto anterior retrata el terror trujillista en general y ensañado contra múltiples familias, como los Martínez Reyna, los Bencosme, Perozo, Ramírez, Larancuent, etc.
Resistir esas tinieblas entrañaba el riesgo de morir cualquier día. Así resistió durante años un significativo número de mujeres que desempeñaron múltiples actividades en la organización y en operativos como vender el periódico.
El testimonio de Cruz Segura coincide con el de Brunilda Soñé, activista revolucionaria, compañera sentimental de José Arismendy Patiño, (Chepito), respecto a la venta del órgano difusor.
Citan varias mujeres con particular liderazgo y arrojo: Carmen Natalia (Comité Central), Carmen Julia e Isabelita Martínez Bonilla, Josefina (Comité Central), y Silvia Padilla Deschamps, Ligia y Dinorah Echavarría Hernández.
Por su desafiante activismo, particularmente en Santiago, Gilda Pérez de Franco (Pericles), figura en un destacado espacio, lo mismo que Maricusa Ornes y Candelaria Rojas. Como secretaria general, Dinorah Echavarría integró el Comité de la Normal de Señoritas: Consuelo Bueno, Ángela Salvucci, Viola Visón, Pastora Espaillat, Mercedes Cordero y Dolores Zucco.
En el listado del libro Bajo la Barbarie, y anexos, figuran Edna Moore Garrido, Minerva Mirabal, las hermanas Bosch Gaviño, Milita García (madre de Julio Raúl Durán), Mireya Mieses, (hermana de Cocuyo Mieses), Delta Soto, entre otras.
Ese rol de las mujeres enriquece la historia de la Juventud Democrática, cuyo espacio y pensamiento aún no ha sido valorado como debe ser.
De ahí el homenaje-reconocimiento a sus héroes y mártires el domingo 5 de agosto, a las 3:30 PM, en la Av. J. F. Kennedy, con Erik Leonard Ekman, entre la Lincoln y la Churchill. En dicho acto, la Fundación Testimonio, Incorporada, dejará inaugurada la Plazoleta Manolo Tavárez. Informaciones adicionales: 809 501-6236.
Santo Domingo, Republica Dominicana, sabado, 28 de julio de 2012.
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