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La creación de una convergencia de partidos y organizaciones sociales, de cara a restablecer el estado de derecho y hacer una revolución moral en la República Dominicana se hace necesario y urgente.
Ya el país no puede seguir hundiéndose más de lo que está.
Esa diabólica Corporación Política y Económico-Financiera llamada PLD, ha hundido al país en el hoyo más profundo de la corrupción y la degradación en todos los sentidos.
El gobierno del PLD, presidido por Danilo Medina, como se esperaba, de por sí fracasó.
Prometió hacer lo que nunca se había hecho, pero la impunidad nunca había sido tan grande como ahora, el endeudamiento ha seguido su ruta perversa y dislocada y la corrupción no se ha detenido y se ha extendido a otros niveles. Entonces, ¿qué es lo nuevo que ha hecho Danilo? ¿Las visitas sorpresas? Ah carajo, pero eso lo hace cualquiera! ¿Sonreír de vez en cuando, a diferencia del corrupto Leonel que no sonreía? No me vengan con soqueteadas que el dominicano lo que más hace es sonreír! ¿Es que a caso somos un país ficción o un circo donde a todos nos ponen de relajo? Algo así o algo parecido es lo que somos.
Pero no nos sorprendamos. Traigo a la memoria de mis lectores el hecho de que este gobierno está manchado de corrupción antes de nacer y desde sus inicios. Este gobierno, a pesar del tinte estúpido y torpe del supuesto apoyo popular, nació con un pecado original: Leonel se robó unos 40 o 60 millones de pesos del presupuesto nacional para garantizar su “Victoria”? Este gobierno lleva en su seno la mancha de la burla, del dolor, de la impotencia de un pueblo y del hambre de los más sufridos. Lleva en su seno la mancha de la ilegitimidad.
Construir un proyecto que tenga como motivación especial destronar la dictadura peledeísta es un gesto que debemos auspiciar y apoyar.
No importa cuántos sectores y personas se unan a esta causa. La causa es justa. Por ella debemos hasta morir.
Ahora que estamos en medio del aniversario de la expedición aérea del 14 de junio del 1959 y de la expedición por mar del 19 de junio del mismo año, es bueno recordar que en esas dos expediciones no se preguntó de qué nacionalidad eran los componentes, ni el color de su piel ni tampoco a qué ideología pertenecían. En esas expediciones habían dominicanos, norteamericanos, cubanos, venezolanos, puertorriqueños, la mayoría eran jóvenes y de esferas sociales diferentes y no se diga de la diversidad ideológica de sus integrantes. Pero había una causa noble y hoy esto debe servirnos de sal y de luz.
Eso fue apenas un año antes de la caída de la dictadura trujillista. En este momento estamos a dos años de la caída de la dictadura leonelista-peledeísta. Perder esta oportunidad sería seguir sometiendo y torturando a un pueblo que por diversas razones ha sido víctima del estrangulamiento por parte de los funcionarios de esa diabólica corporación morada.
Continuaremos en la próxima entrega… http://elpaisdominicano.do/
Santo Domingo, R.D., sábado, 21 de junio de 2014.
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