Soluciones electorales

Radhamés Gómez Sánchez

Lo bueno de las campañas electorales es que siente uno a mano el remedio a la mala situación nacional.

De la oposición ofrecen soluciones a los males acumulados por el desgobierno. Los candidatos oficialistas también dan salidas al entrampe colectivo.

Cambian las actitudes de los mandantes y por eso el pueblo ve soluciones por breve tiempo.

Arturo Del Tiempo y familia

Se olvida el pueblo Del Tiempo, de Agosto y de Paya tanto como de los engaños de que en el pasado más reciente ha sido víctima.

Los peledeístas dicen ahora que los préstamos internacionales sirven para resolver problemas. Pero desde la oposición atribuian todos los problemas a los préstamos del gobierno anterior.

Los 500 millones de dólares de bonos soberanos que el gobierno de Hipólito Mejía lanzó, eran perniciosos y lesivos. En cambio, son buenos los mil millones de dólares que ahora gestiona el de Leonel Fernández (400 embolsillados ya).

Pina, Themistocles Montas, Bengoa, Felix Bautista y El Principe,

Leonel Fernandez

Leonel ha duplicado la deuda pública y su tendencia es seguir incrementándola hasta el infinito. Total, que la pagarán los que vengan después.

Para eso procura el control de un congreso al que, como aconteció con los 130 millones de dólares de la SunLand, puede burlar a discreción y sin consecuencias.

La comida que falta en los hogares por cuatro años, es repartida a tutiplén en caravanas y desfiles del oficialismo.

Obras públicas reclamadas de todas formas todo el tiempo por todo el mundo, solamente en tiempos de campaña electoral suelen ser iniciadas, si no ofrecidas otra vez.

Así Leonel, que no es candidato, inaugura seis acueductos necesarios para comunidades de Bonao, un mercado en San Cristóbal y cuchucientas obras reclamadas pero nunca atendidas, provocando disgusto y desorden.

En otros tiempos las obras que inaugura nunca fueron ofrecidas, ni habló de ellas, como el Metro de Villa Mella. O dice que el sector privado construirá las que se adelantan con préstamos del gobierno.

En los tiempos electorales no. Ahora llegan las respuestas a todo, excepto a la inquietud del pueblo por las pecaminosas y cada vez más evidentes vinculaciones de su gobierno con el narcotráfico y la delincuencia.

Del Vaticano se dice que ha llegado el tiempo de la verdad, de la transparencia y la credibilidad. Excepto aquí para esta gavilla cucañera.

Aquí seguirán las penumbras del silencio, el secreto y el discrecionismo normando inconductas del gobierno cuyas enaguas le han salido de las ropas.

Leonel apoyando candidatos PLD en Santiago

Las mentiras y los engaños son cada vez más evidentes; no pueden ocultar lo que a la vista de todos está pasando.

Mentiras y engaños propios de los tiempos electorales para cautivar incautos y a un pueblo al que se le niegan no solamente obras públicas, sino servicios básicos como el de luz y agua, tanto como salud y educación que faltan.

La clave, como puede uno ver en cada campaña electoral, está en las promesas, no en las realizaciones de políticos que ahora todo ofrecen para todo negarlo desde el gobierno.

Las que se oyen son soluciones electorales que nunca se ven realizadas...hasta la próxima campaña.

Santo Domingo, R.D., lunes, 26 de abril de 2010

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