Teófilo Quico Tabar
Como he manifestado en muchas ocasiones, el PRD tiene todas las posibilidades de alcanzar el poder el próximo año. No solo porque se mantienen activas todas sus estructuras dirigenciales y de base, motorizadas aún más por la dinámica de la Convención, sino además, por el desgaste natural que produce el ejercicio del poder prolongado, agravado por la cantidad de descuidos oficiales en áreas importantes que provocan disgusto e irritación en la población, a pesar de que la gente se mantiene en aparente calma.
A medidas que se acerca la fecha en que habrá de celebrarse la Convención para escoger su candidato a la presidencia de la República para la elecciones del 2012, mayor cuidado deben tener sus líderes en mantener su accionar enmarcado en la vía de la prudencia para evitar que se produzcan escollos que hagan difíciles los necesarios entendimientos que deberán producirse luego de esa importante jornada democrática.
Los perredeístas que quieren y necesitan alcanzar el poder, junto a otros grupos y sectores que sin ser necesariamente del PRD entienden que es la única alternativa real de oposición para producir un cambio político, deben convertirse en celosos guardianes para evitar situaciones que puedan atentar contra los necesarios entendimientos futuros.
La estabilidad democrática de la nación depende mucho de la propia estabilidad institucional del PRD, puesto que es una de las organizaciones fundamentales del sistema, y no puede estar a expensas de actitudes individuales, que sin representar necesariamente el pensamiento de los principales líderes que procuran ser nominados por la mayoría de sus bases, puedan poner en riesgo la requerida unidad de la organización.
La confianza que han puesto todos los sectores en la Comisión Organizadora que habrá de producir resultados creíbles, de por sí garantiza que luego de la Convención, el único camino democrático a recorrer es el de la aceptación de los mismos y el establecimiento de puentes que hagan posible la integración de todos hacia el objetivo común de las elecciones del 2012.
Símbolo del PRD.
Pero sería un error ignorar que existen dentro del PRD como en otras áreas de la sociedad que coinciden con esa organización, personas y sectores que conforman una franja de equidistancia importante y necesaria, que aún pudiendo tener simpatías por cualquiera de los candidatos, han preferido mantenerse al margen de las luchas internas, confiando en la decisión de la organización, para luego del evento integrarse plenamente y colaborar en la construcción de los necesarios puentes de unidad y entendimientos para el triunfo.
El PRD necesitará todas sus fuerzas, no importa de que lado se encuentren en este momento, para después de la Convención crear una fuerza monolítica y lanzarse en procura de otros sectores y personas, que coincidiendo con esa causa o disgustados con la situación de deterioro a que los ha conducido el gobierno, cierren filas en torno a un proyecto nacional, triunfalista, democrático y renovador.
Santo Domingo, R.D., jueves, 20 de enero de 2011.
No hay comentarios:
Publicar un comentario