viernes, 25 de febrero de 2011

De México a Filipinas

Chiqui Vicioso

En México se acaba de celebrar la X Jornada Cultural Dominicana, la cual se inauguró con mi conferencia sobre Don Juan Bosch y su visión del Caribe, en el Auditorio Leopoldo Zea del Instituto de Investigaciones sobre El Caribe de la UNAM.  En colaboración con la Embajada de España, se presentó en el Centro Cultural de España la exposición Mover la Roca, del Colectivo Quinta Pata, representado por Belkys Ramírez y Pascal Meccarielo.  El 18 fue el Día Dominicano, con imágenes de Juan Bosch, y el 22 y 23 la instalación solemne de la Cátedra Extraordinaria de Estudios Latinoamericanos Pedro Henríquez Ureña, en el Aula Magna de la UNAM. La conferencia magistral estuvo a cargo del poeta Andrés L. Mateo.

 Entre otras actividades, cabe citar una conferencia magistral sobre las relaciones históricas en el marco de la Independencia, entre México y nuestro país, por nuestro embajador Fernando Pérez Memén.

El historiador y ex-director del diario La Información, de Santiago, sentó cátedra. Su erudición desplegada impresionó a los presentes, para orgullo de la delegación. Un aliciente necesario cuando se proviene de una media isla tan zarandeadaa como la nuestra por los medios tanto dentro como fuera de nuestras aguas.

 Empero, ¿que tiene esto que ver con Filipinas?

 Es que a mi regreso, vía Panamá, noté que en la sala de espera había una treintena de jóvenes hombres asiáticos que viajaban al país. Conversaban en una lengua que no conocía y a veces en inglés.

Me  enteré que tenían ya tres días volando  desde Filipinas.

 ¿Y que van a hacer en Dominicana?
Vamos atrabajar en una mina...
¿Son mineros?
 No.
 ¿Y?
Nos reclutó un agente y somos el segundo grupo, porque ya hay cien filipinos trabajando allá...
¿Cómo se llama la mina?
 Sólo sabemos que nos llevarán al Hotel Marriot esta noche y de ahí a la mina...

Como casi suena a un caso de tráfico, les di mi tarjeta y les dije que si tenían algún problema llamaran a la Cancillería, pero no pude evitar hacerme  preguntas:

1- ¿No fue la creación de  dos mil empleos  la razón para aceptar en el país a mineras con un muy cuestionado y denunciado desempeño en el aspecto medioambiental?

 2- ¿Por qué  están estas mineras importando  obreros no calificados, que además no hablan español? ¿A qué se le teme? ¿A la denuncia del daño medioambiental, o al Código de Trabajo Dominicano?

3- ¿Está la Embajada de  Estados Unidos informada sobre este tráfico de trabajadores, realizado por compañías norteamericanas, aunque estén registradas como canadienses, cuando la ciudad duerme?

Santo Domingo, R.D., viernes, 25 de febrero de 2011.

http://www.elnacional.com.do/opiniones/2011/2/25/76089/De-Mexico-a-Filipinas

No hay comentarios:

Translate