ELSA PENA NADAL
Viene preocupando y contrariando a la sociedad, es el maltrato a la Constitución que el mismo Presidente prohijara
La primera dama de Guatemala, Sandra Torres Casanova de Colom, inició el proceso de divorcio contra su esposo, el actual presidente de esa nación, Álvaro Colom, a fin de ella poder optar por la candidatura a la presidencia de su país.
Un tecnicismo legal que si bien le permite lograr sus objetivos, no le da muy buena imagen a una mujer que aspira a presidir su país y a quien, por ello, le corresponde ser ejemplo para toda la sociedad. La pareja presidencial ha optado por “buscarle la vuelta” a la Ley, pero está claro que, a partir de que se promulgue el divorcio, si deciden continuar juntos, pasarán a vivir en concubinato.
Obviamente, el espíritu de la Ley lo que busca es que la influencia del marido no favorezca su candidatura y que no sean utilizados los recursos del Estado en la campaña de la hoy primera dama, algo que no se garantiza con este tecnicismo del divorcio que no es mas que un simulacro de separación de hecho, no de derecho.
Sandra Torres y su esposo Álvaro Colom, estuvieron envueltos en el 2008 en un escándalo a raíz de la muerte del polémico periodista Hugo Arce quien dejara un video grabado, acusándoles a ambos de su muerte. Arce enfrentaba un juicio y se sentía perseguido por el poder del Estado.
Torres dijo en rueda de prensa que se divorciará del presidente pese a que lo ama, para levantar un impedimento legal y así poder casarse “con el pueblo”. “El amor por Guatemala es la razón por la cual el presidente y yo anteponemos los intereses del país y no nuestros propios intereses”, afirmó Torres según recoge un diario guatemalteco.
Miguel Vargas / Hipólito Mejía.
Pero de vuelta ya en nuestro país, me llama también la atención la conducta de otros dos políticos del patio. Uno de ellos, Vargas Maldonado quien, como dice el pueblo, “perdió legal” en la pasada convención del PRD. Algo que ya le decían las encuestas y que hasta su propio equipo técnico reconoció públicamente al declarar que en la revisión que hiciera del padrón electoral, no encontró a los 200 mil peledeístas que el propio MV denunció que habían participado en la contienda interna del PRD.
Después de este pataleo absurdo cabe preguntarle a Vargas por qué el pueblo, la opinión publica, los medios de comunicación; en fin, la sociedad civil, ¡y hasta Diógenes & Boquechivo! entienden que él perdió legal, en tanto él sigue empecinado en desconocer la legalidad y la honestidad probada de los miembros de la Comisión Nacional Organizadora, CNO, de su partido. Y lo que es peor, convoca al Comité Político, organismo incapacitado para decidir en este caso, y sin el quórum necesario y con la sola presencia de sus acólitos, procede a “quitar y poner” a su antojo, pretendiendo desmantelar a la CNO.
Pero lo que raya en la desesperación, y hasta da “vergüenza ajena” como dicen los chilenos, es la convocatoria de los seguidores que aún le van quedando para decidir, como en la ruleta rusa, si anulan la convención; si negocian con Hipólito; si dejan que Hipólito sea el candidato sin negociar, o si convocan a la Convención de Delegados y proclaman a Miguel Vargas Maldonado como candidato del PRD. ¡O sea, que cualquier cosa se vale!
¿Así es como MV piensa que podrá acceder a la presidencia de la Republica? Así es como pretende gobernar a este país? ¡Quizás le conviniera pagar ahora mismo una encuesta para medir cómo anda su imagen y nivel de popularidad, si es que todavía no entiende que ya su “momentum” pasó!
No es la primera derrota política de MV y con la millonada invertida y perdida, y con las deudas contraídas, lo mas lógico es que Vargas admita que la política no es lo suyo y que se dedique a sus negocios, donde sí ha demostrado ser exitoso, sin requerir del carisma ni del liderazgo que debe acompañar a los políticos. ¿O es que, por el contrario, se piensa en la presidencia de la República como “el mejor de los negocios”, donde a otros les ha ido tan bien sin haber sido antes comerciantes? De ser así, Dios sabrá de qué nos esta librando.
Pero toda la culpa no es solo suya: los asesores que le drenaron el bolsillo ahora tienen que justificarse y lo siguen mal aconsejado pues no encuentran el bajadero para salir de este embrollo y quedar bien ante MV y la opinión pública, cuando lo mas juicioso hubiese sido aceptar en su momento la derrota y negociar con Hipólito, pero lo único que han conseguido hasta ahora es contribuir a acrecentar la imagen de un Hipólito Mejía que tiene a todos asombrados con la manera en que se ha manejado frente a la crisis post electoral.
Leonel Fernández.
Finalmente, el otro político al que me quiero referir es al Honorable Señor Presidente de la República, y no porque piense que pretenda reelegirse, porque ya él midió y vio que la vara no llega pese a que supuestamente le entregarán dos millones de firmas, de fácil recolección para los que bregan con nominillas, bonos gas-luz, tarjetas de solidaridad y otros amarres.
Y es que hay que reconocer que Leonel le gana a Miguel en inteligencia pues Leonel sí vio a tiempo que la opinión pública no favorece sus intentos reeleccionistas y que hasta la Iglesia Católica tronó y que todos los numeritos e informes locales e internacionales, ponen en entredicho las bonanzas que sólo tienen vida en sus discursos desde palacio; y que de seguir aspirando a quedarse, haría mas daño que bien a su partido, donde hay mas candidatos a la presidencia que en elecciones anteriores, Primera Dama incluida. (Y hasta se dice que favorecerá a Alburquerque quien a su vez llevaría a doña Margarita como vicepresidenta).
Pues bien, lo que sí viene preocupando y contrariando a la sociedad, es el maltrato a la Constitución que el mismo Presidente prohijara, y que me lleva a pensar que Fernández Reyna, al parecer, tiene de la Constitución el mismo concepto que de ella tenía Joaquín Balaguer, de que no es en realidad más que “un simple pedazo de papel”.
Para referirme a este punto simplemente voy a copiar íntegro lo que sobre este tema escribiera Homero Figueroa en su columna Espejo de Papel, titulada “El Sordo Abraham”:
“Leonel observa leyes sin mirar que, con cada arreglo hecho, deja todo deshecho. Fernández propuso y consiguió una reforma constitucional. Es su hija y, aunque no se le parezca, debe reconocerla. El Presidente, como Abrahán, dispuso leña sobre el altar legislativo y allí amarró la Constitución. La daga malintencionada apunta al cuello de esta criatura jurídica. La voz del pueblo es la voz de Dios. ¡No le hagas nada! Clama la voz. La mano, sin fe democrática, descarga el golpe. El parricidio constitucional queda consumado. La institucionalidad se desangra. Este sordo Abraham dejará sin herencia política a su descendencia partidaria.” (Diario Libre, martes 23 de Marzo, 2011)
¡Con semejantes manejos y “ejemplos”, ¿qué podemos pedirle y esperar de la juventud que será nuestro relevo? La democracia, como la felicidad, no está en un lugar especifico; es un ejercicio diario, un tránsito permanente en su búsqueda, pero no debería ser esta suerte de vía crucis tan pesado. ¡Ojala que este tiempo de cuaresma sirva de reflexión a nuestros políticos y desemboque en una feliz pascua de resurrección para nuestro país!
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