ORLANDO JORGE MERA
La Constitución es el freno al ejercicio del poder sin límites. El derecho que tiene el presidente Leonel Fernández a observar las leyes nadie lo cuestiona, pues está consagrado en la Constitución. Lo que se cuestiona y preocupa es el procedimiento que está usando el Congreso Nacional para conocer las observaciones a las leyes orgánicas, que desconoce totalmente las disposiciones de la Constitución.
Fue lo que ocurrió con la Ley Orgánica del Consejo Nacional de la Magistratura, observada por el presidente, y reenviada al Senado y luego a la Cámara de Diputados para su discusión otra vez. En ambas cámaras fue aprobada por mayoría simple. Por ejemplo, en la Cámara de Diputados fue aprobada por mayoría simple (con 92 diputados a favor, 71 diputados en contra y tres abstenciones) en franco desconocimiento de la necesidad de una mayoría de dos tercios de los presentes para dicha aprobación como manda la Constitución en los casos de las leyes orgánicas.
También, el presidente ha observado la Ley Orgánica de Tribunal Constitucional, con el mismo propósito y objetivo. El artículo 112 de la Constitución dispone que: “Las leyes orgánicas son aquellas que por su naturaleza regulan los derechos fundamentales; la estructura y organización de los poderes públicos; la función pública; el régimen electoral; el régimen económico financiero; el presupuesto, planificación e inversión pública; la organización territorial; los procedimientos constitucionales; la seguridad y defensa; las materias expresamente referidas por la Constitución y otras de igual naturaleza. Para su aprobación o modificación requerirán del voto favorable de las dos terceras partes de los presentes en ambas cámaras.”
El PRD, siendo coherente con su defensa a la Constitución, ha depositado una acción en inconstitucionalidad no solo contra la Ley Orgánica del CNM, sino contra el procedimiento seguido por el Congreso. Es la oportunidad histórica que tiene la Suprema Corte de Justicia de evitar que se produzca una estocada a la Constitución, y de sentar un precedente que ponga frenos al poder.
Santo Domingo, R.D., sábado, 26 de marzo de 2011.
No hay comentarios:
Publicar un comentario