José Alejandro Ayuso
El día que sale a la luz esta columna estaremos a escasas horas de que culmine el 2010 que, según los análisis y como casi todos los años, tuvo sus luces y sus sombras. En mi parecer la oscuridad fue predominante durante la mayor parte del tiempo y sólo pocos destellos, excepción que confirma la regla, fueron vistos en el firmamento nacional.
Uno de ellos ocurrió el 26 de enero cuando, producto de una reforma constitucional profunda, integral, pactada entre las fuerzas políticas y consultada la sociedad civil (el reclamo de la Constituyente lamentablemente perdió el pleito), fue proclamada la nueva Norma Fundamental de la nación dominicana, con una moderna y racional organización del Estado y un amplio catálogo de derechos fundamentales garantizables a la ciudadanía.
Milton Ray Guevara.
Sin embargo, y aquí comienza el apagón (en sentidos propio y figurado), aún la nueva Constitución con la tinta fresca un grupo de “juristas”, más impregnados por el culto a la personalidad y el mesianismo “destinista” que por la técnica jurídica, comienzan a “interpretar” el artículo 124 sobre la elección presidencial en el sentido de que “no dice lo que dice”, con el execrable objetivo de saciar su vicio por la lisonja y el continuismo en desmedro de la institucionalidad democrática del país.
Cesar Pina Toribio.
Pero como si esto fuera poco, una noticia de primera plana publicada ayer miércoles en el matutino Hoy atribuye al Presidente y al Vicepresidente de la República, a los presidentes y miembros de las cámaras legislativas y a altos funcionarios del Poder Ejecutivo (con las honrosas excepciones del Consultor Jurídico del PE y del Procurador General), estar de acuerdo con las modificaciones a la Ley orgánica del Tribunal Constitucional aprobadas en el Senado que, como bien indica Don Milton Ray Guevara (constitucionalista que no necesita presentación), sucumbió ante las presiones de la Suprema Corte de Justicia “y ambos se han colocado al margen de la Constitución”. (Cuando se lea esta entrega sabremos si los diputados del PRD acudieron al llamado de la Patria…)
Radhames Jimenez.
Por otra parte, el Gobierno prende nueva vez el “arbolito navideño” del crecimiento económico del 7 y pico por ciento, “muy por encima de la media latinoamericana lo que denota el magistral manejo por parte del equipo…” bla bla bla…mucha luz para algunos que han tenido que contratar asesores financieros para manejarles sus “fortunas mal habidas”, pero la eterna oscuridad para los pobres que sólo reciben del PIB menos del 4% para su educación y una denigrante “cajanasta” con el sello “e’pa’lante que vamos” para cenar en Nochebuena.
Y como estamos también “en pelota”, luces para Estrellas, Toros, Gigantes y el Escogido que pasaron al “round robin”, mucha sombra para las Águilas que no lo lograron a pesar de luchar hasta el final, y la más absoluta oscuridad para el Glorioso Licey (¡se nota mi simpatía!) que se alojó en el frío sótano.
Por último, mis felicitaciones al grande Juan Luis Guerra por advertir con ritmo y poesía que
“La guagua va en reversa”.
Santo Domingo, R.D., jueves, 30 de diciembre de 2010.
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