lunes, 13 de diciembre de 2010

La pelea es peleando

Crónica del presente //
Euclides Gutiérrez Félix

(-I-)

Hace más de veinte años, tal vez treinta, el autor de esta columna asistía con frecuencia al programa que con el nombre de La Revista 110 producía en Radio Televisión Dominicana, Julito Hazim, acompañado de Machi Constant y Consuelo Despradel. Fue durante esas comparecencias en las cuales nos atrevimos a realizar análisis y conclusiones en torno a la vida política, económica y social del pueblo dominicano y su futuro. Allí dijimos que no se correspondía con la verdad, que todos los militares fueran seguidores incondicionales y simpatizantes del doctor Balaguer y su gobierno cuando los balagueristas, con atrevido lenguaje,  pregonaban a los cuatro vientos el sometimiento incondicional de las fuerzas armadas  a su persona. Y llegamos a afirmar muchas veces, que ni siquiera Rafael Trujillo Molina, que fue jefe militar, político, y económico de la Nación, organizador y modernizador de las Fuerzas Armadas, logró tener una incondicionalidad absoluta a su persona. Aníbal Vallejo, Ramón Vásquez Rivera, Raúl Comme  y  Eugenio Marchena, los dos primeros ligados por amistad estrecha con Trujillo,  fueron después acusados y asesinados por él, porque lo adversaron.

La Constitución  que el doctor Balaguer elaboró a partir de 1966, no prescribía  en ninguno de sus artículos la incondicionalidad absoluta a un liderato político caudillista. Y advertíamos también en esos programas,  del creciente deterioro y desorganización de las débiles estructuras institucionales de la república de Haití, dirigida en aquel momento por un presidente vitalicio llamado François Duvalier; criterio nuestro que vino a afianzarse, cuando el más grande maestro político dominicano y de América de todos los tiempos, Juan Bosch, sentenció con el alcance de su mirada visionaria, que Haití había dejado de ser una república o una sociedad organizada, porque se había convertido en “un conglomerado humano”. En la medida en que esa situación se profundizaba y muerto Duvalier, le sustituyó en la presidencia  su hijo Jean-Claude Duvalier, nuestros juicios externados en esos programas alcanzaron simpatía y apoyo extraordinarios.

La realidad de lo que vive ahora Haití, ese conglomerado humano, por el cual han pasado siete u ocho “presidentes” , entre ellos un alucinado, políticamente analfabeto y brujo, llamado Jean Bertrand Aristide, enemigo frontal de los dominicanos y una figura incoherente y disparatada, que pudo aparecer en el escenario político de esta isla de Santo Domingo, llamada por Cristóbal Colón La Española como una consecuencia preocupante de la torpe política regional de  Estados Unidos en los gobiernos de George Bush padre y Bill Clinton. El primero de los presidentes estadounidense George Bush padre, dispuso una suma de cien millones de dólares para que un Bolívar enano, llamado Carlos Andrés Pérez, se convirtiera en el padrastro y tutor del pobre pueblo haitiano. (Continuaremos).

Santo Domingo, R.D., lunes, 13 de diciembre de 2010.

http://www.elnacional.com.do/opiniones/2010/12/13/69268/Cronica-del-presente

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