Sí, la clase media

Al día // 

Juan José Ayuso

buenapila@yahoo.es

¿Por qué predominaron las organizaciones, colegios y personas de clase media –estratos medio y alto- en el “lunes amarillo” que el día 6 reclamó que se cumpla la ley y que el 4% del Producto Interno Bruto se destine a Educación?

 La respuesta es simple.

 La clase media sabe lo que es la buena educación y la paga a precio de oro en los colegios privados.

 Y porque lo sabe, la quisiera para los dominicanos del estrato bajo de su clase y para la clase pobre.

 La clase media baja y los pobres no podrían reclamar el 4%  del PIB para la educación porque no saben o apenas intuyen lo que es la Educación –con mayúscula, calificada y eficiente como debe ser.

 Por eso, las organizaciones, colegios y personas de clase media, en un gesto solidario, lograron que el país se vistiese de amarillo el lunes 6 y un respaldo casi unánime al reclamo del 4%.

 ¿Se destinaría de esos fondos a que el ministro de Educación, que ya tiene un ascensor que lo lleva “en vivo y directo” a su despacho se decidiera por  un helicóptero y  un helipuerto?

   ¿Se destinaría de esos fondos a aumentar los contratos de desayuno escolar que sirven leche descompuesta para intoxicar a los niños pobres que asisten a las escuelas públicas?

 ¿Pasarían esos fondos a formar parte del carnaval de corrupción que realiza el gobierno del presidente Fernández de 2004 a esta fecha?

 No y no.

 Las organizaciones, colegios  y personas de clase media –entre las primeras y las terceras está la fuente de formación de opinión pública y la mentalidad de la mayoría de los periodistas-, se comprometen con su campaña a una tarea de vigilancia del mejor y más pulcro uso de los fondos del 4% para la Educación como prioridad y para las prioridades que, en la actividad, están marcadas por la razón, la lógica y una cantidad de estudios y análisis del área que se ha publicado. Sin corrupción.

 La organización del lunes amarillo, que contó con una participación masiva de la sociedad, demuestra que los dominicanos pueden reclamar de la manera más pacífica y creativa la satisfacción de los derechos de todos.

 Y así como se preparó el lunes amarillo, crear y mantener la decisión de vigilar la inversión del 4% en Educación y de cuidar el respeto por las prioridades de inversión que están estudiadas y escritas y que son conocidas de sobra por los dominicanos concientes.  

 Pero era la clase media y eran sus organizaciones, colegios y personas las que tenían la responsabilidad de dar este primer paso firme en la lucha de respaldo a un reclamo que, seguro, tendrá que continuar.

 (En la última encuesta Gallup, realizada mucho antes del lunes amarillo, el 91% de la población respaldó el 4%).

Santo Domingo, R.D., jueves, 23 de diciembre de 2010.

http://www.elnacional.com.do/opiniones/2010/12/23/70224/Al-dia

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