Venecia Joaquín
El Presidente Leonel Fernández pasó varios días con sus noches en el Palacio Nacional preparando el discurso que dirigirá a la nación el próximo 27 de febrero, día de la Independencia. Hace casi un año que no habla en el país. Sabemos lo que piensa, por lo que dice en el extranjero. En ese sentido agradecemos sus múltiples viajes. Desde allá nos enteramos de sus anhelos para el mundo y deducimos que para nosotros.
Cuando la cosa se complica y tienen que tomar una medida odiosa, sale al exterior. Por eso viaja tanto. Siempre hay un lugar a donde ir, universidad que visitar, conferencia, proyecto de cine, reuniones con empresarios, cumbre de mandatarios, etc. La cuestión es salir hasta que se normalice la situación. Sus actividades en el exterior desvían la atención.
El día de la Independencia Nacional no puede evitar darle el frente a la población. El pueblo no aguanta tantas crisis. Quiere saber porque se ha disparado el costo de la canasta familiar. A que se debe el auge de la delincuencia, violencia, asesinatos, corrupción, al extremo que no se puede salir a la calle. Como ha permitido que el país se llene de inmigrantes haitianos poniendo en peligro la soberanía nacional. Por que no ayuda los agricultores, la educación, los pueblos y ha aumentado la miseria a nivel nacional.
Sabemos que ha construido un metro, ha hecho millonarios un grupito y por lo menos a la Fundación Global le va bien. Pero ¿Por qué no ayuda la mayoría que lo llevo al poder? Que le impide combatir la miseria, controlar la delincuencia y la migración haitiana.
Responder estas inquietudes es difícil para el. Por eso no ha podido delegar la preparación de su discurso.. Ha tenido que fajarse a hacerlo. Busca presentar un marco teórico convincente, atractivo. Debe hacer una cirugía estética en el cuerpo de la nación. Esta encerrado haciéndosela. ¡Cirugías, liposucciones y botox por doquier!!. Así que cuando en su discurso haga el diagnostico y planificación del país, la población creerá que habla de otra nación.
Como experto en sociología de la comunicación, esgrimirá la estabilidad de la tasa de cambio, tarjeta de solidaridad y bono gas, sin penetrar en el alma del pueblo. Querrá demostrar que todo es modernismo, globalización y que solo lo captan los inteligentes que conceptualizan.
Me imagino la sala del Congreso Nacional, iluminada, repleta de funcionarios millonarios, sonrientes y bien trajeados, recibiendo la figura del país, preciosa, llena de cirugías, producto de la fantasía del Mandatario. Respiraran aliviados al escucharlo. Se pondrán de pies y aplaudirán delirantes como pidiendo su permanencia eterna en el poder. Oh, Dios!!.
Santo Domingo, R.D., viernes, 25 de febrero de 2011.
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